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​La elevación del seno maxilar es una técnica quirúrgica que practican los odontólogos y cirujanos maxilofaciales. Se trata de realizar una incisión en las regiones molares o premolares para acceder al maxilar y a la pared lateral del seno y a la membrana que lo recubre. Es entonces cuando se empuja el seno maxilar hacia arriba y el hueco que queda se rellena con gránulos de injerto óseo, que pueden ser sintéticos, o de huesos del propio paciente. Generalmente se utilizan injertos sintéticos.

Una vez que el odontólogo ha conseguido la elevación adecuada, se cierra la incisión con puntos de sutura. Por supuesto, esta intervención se realiza con anestesia local por infiltración. El tiempo de regeneración del seno maxilar suele oscilar entre cuatro y nueve meses. Aunque el tiempo lo marcan las especificidades de cada paciente y los milímetros de altura del hueso natural necesarios y que suele ser un mínimo de 4 milímetros.

Cuando es necesario realizar una elevación de seno maxilar

El principal objetivo de la elevación de seno maxilar es aumentar la altura vertical del hueso maxilar superior para permitir la colocación de implantes dentales. Éstos necesitan una base ósea fuerte y adecuada en la que poder fijarse, y se dan casos en los que el paciente no posee dicha base.

El tiempo de regeneración del hueso maxilar suele oscilar entre los cuatro y los nueve meses, aunque hay personas que tienen una base sólida de hueso y se pueden colocar los implantes a la vez que se realiza la elevación del seno maxilar. En estos casos, el proceso de osteointegración de los implantes se produce de forma simultánea al del injerto óseo.

¿Qué causa la disminución del seno maxilar?

Las causas más frecuentes de disminución del volumen óseo son:

  • Las enfermedades de las encías en estado avanzado: gingivitis o periodontitis
  • Falta de piezas dentales durante un tiempo prolongado
  • El seno maxilar puede sufrir variaciones anatómicas con el paso de los años.
  • Traumas mandibulares que han causado daño al hueso

Si se da alguna de estas circunstancias, a la hora de valorar la colocación de implantes es necesario conocer la firmeza y altura del seno maxilar, y analizar si es necesario recurrir a su elevación.

¿Y qué ocurre tras esta intervención?

Las molestias más frecuentes son dolor e inflamación y también se puede producir sangrado por la boca y por la nariz. En este último caso y si se produce durante varios días, es necesario recurrir al odontólogo.

Durante los días siguientes a la intervención, es aconsejable seguir una dieta blanda, tomar analgésicos si se tiene dolor y evitar estornudos fuertes para evitar que el injerto se desplace o se desestabilice. También se recomienda mantener la cabeza en alto y utilizar almohadas para mantener una elevación, al menos de 30 grados.

Transcurridas 24 horas después de la elevación del seno maxilar, y solo si el odontólogo lo ha prescrito, el paciente puede enjuagarse la boca y cepillarse la boca con movimientos muy suaves. Esta es la mejor forma de evitar infecciones.

En Solución Dental Embajadores contamos con una amplia experiencia en este tipo de intervenciones. Si te estás planteando sustituir tus piezas perdidas o dañadas con implantes dentales, consúltanos. Estudiaremos tu caso y te propondremos la solución más adecuada para tu caso.

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